Una revisión sistemática publicada en *PLOS ONE* el 20 de octubre de 2024, ofrece datos alarmantes sobre la creciente crisis de muertes relacionadas con las drogas en Escocia. Llevada a cabo por investigadores de la Universidad del Oeste de Escocia, la revisión destaca el preocupante papel de los gabapentinoides y el etizolam en el aumento de las muertes relacionadas con las drogas en el país.
Escocia se enfrenta a una tasa desproporcionadamente alta de muertes relacionadas con las drogas en comparación con el resto de Europa, y esta revisión arroja luz sobre dos sustancias que aparecen cada vez con más frecuencia en los informes toxicológicos: los gabapentinoides, prescritos habitualmente para el dolor y la ansiedad, y el etizolam, una benzodiacepina de diseño.
El estudio, dirigido por Beata Ciesluk, el Dr. Greig Inglis, Adrian Parke y la Dra. Lucy J. Troup, analizó 18 estudios revisados por pares publicados entre 2013 y 2023. Revela que desde 2015, las muertes relacionadas tanto con gabapentinoides como con etizolam han mostrado un marcado aumento, particularmente entre las mujeres mayores y dentro del sistema penitenciario escocés.
El informe señala una tendencia creciente al policonsumo, en el que los gabapentinoides y el etizolam se combinan con otras sustancias como los opioides, lo que aumenta el riesgo de sobredosis mortales. De hecho, el policonsumo se identificó como el factor que más contribuye a los resultados adversos y las muertes relacionadas con estas sustancias.
La revisión señala que los gabapentinoides -prescritos para el dolor neuropático y la ansiedad- están cada vez más implicados en las muertes relacionadas con las drogas en Escocia. Las prescripciones de gabapentinoides han aumentado, a pesar de la preocupación que suscita su uso indebido y su potencial de abuso. El informe indica que estos fármacos, aunque no suelen ser letales por sí solos, se vuelven peligrosos cuando se combinan con opiáceos y otros depresores, provocando a menudo depresión respiratoria y desenlaces mortales.
El etizolam, una benzodiacepina de diseño desarrollada originalmente como ansiolítico, también ha experimentado un fuerte aumento del consumo indebido. Aunque se comercializa como menos letal que las benzodiacepinas tradicionales, su amplia disponibilidad y su uso frecuente en combinación con otras drogas la han convertido en un factor importante de la crisis de las DRD en Escocia. El mercado ilícito del etizolam se ha expandido rápidamente, con una amplia circulación de pastillas falsificadas. A menudo contienen dosis impredecibles, lo que agrava el riesgo de sobredosis.
El informe reclama medidas urgentes para hacer frente a estas preocupantes tendencias. Sugiere que las iniciativas escocesas para restringir la prescripción de opiáceos y benzodiacepinas pueden haber conducido involuntariamente a las personas hacia los gabapentinoides y las benzodiacepinas de diseño, como el etizolam. A medida que se agrava la crisis, se hace cada vez más evidente la necesidad de una educación específica, estrategias de reducción de daños y normativas más estrictas.
El artículo completo puede consultarse en este enlace (clearnet).
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